Un Centro Deportivo
Del Cuerpo al Alma. (primera parte)
Por
Edgardo Tosi
En la Calle Habana al 4542 entre Benito Juárez y Marcos Paz, sobre las vías del
ferrocarril San Martín se encuentra el Ateneo Félix Marino, centro deportivo de
magníficas y muy bien mantenidas instalaciones conocido como tal por todo el
barrio, pero de polifacética y colorida historia nacida desde los mismos
orígenes de Villa Devoto, que los vecinos generalmente desconocen.
Este campo deportivo que había pertenecido al Villa Devoto Lawn Tennis Club
habría sido adquirido durante 1938, para ser utilizado fundamentalmente por la
Juventud Obrera Católica, habiendo necesitado trabajos de puesta a punto en sus
instalaciones. Se reacondicionarán algunas de sus canchas de tenis, se
construirá una pileta de natación complementada por una batería de trampolines,
un frontón de paleta, una cancha de básquet y una pista de patín, la que
permitiría la práctica de hockey sobre ruedas y una cancha de bochas. Muchas de
estas cosas hoy no existen.
Su primeros pasos como Ateneo de la Federación de Obreros Católicos, comienza a
las 15 del 1 de julio de 1939 con la llegada al lugar del Cardenal Dr. Santiago
Luis Copello, primer purpurado de América Latina, para participar del acto de
inauguración. Entre la numerosa concurrencia que recibía al arzobispo de Buenos
Aires se encontraba el presidente de aquella Federación, que lo sería por mas de
treinta años, don Félix B. Marino.
Luego que el cardenal impartiera la bendición al lugar, hablaría el Asesor
General de la Federación de Círculos de Obreros Católico Pbro. Dr. Rodolfo
Carboni, quien definiría las inquietudes que los había movilizado para crear
aquel que era su primer ateneo deportivo dentro de la ciudad de Buenos Aires,
diferentes sin duda de las que habían movilizado por mas de cuarenta años al
club anteriormente establecido en el lugar que nucleara la población de origen
británico de Villa Devoto.
«Nuestra juventud no se formará aquí; lo que sería para una institución laica
finalidad completa, no será para nosotros sino comienzo de obra» y redondeando
la idea repetiría palabras de la encíclica sobre educación cristiana: «la
exaltación del atletismo, que aun para la educación clásica pagana señaló la
degeneración y decadencia de la verdadera educación física aparece en los
pueblos modernos tanto mas ponderada cuanto mas se olvidan y conculcan las
enseñanzas divinas»... «Nada debe encontrar en este lugar (el joven) que no lo
ayude para su formación... Cristiano ante todo, que viva informado por la fe.
Apóstol en un ambiente de impiedad brutal, debe tener la fortaleza de un cruzado
joven, conquistador de jóvenes debe atraer por el influjo poderoso de la virtud
que es ante todo radiación de pureza y de paciencia. Contento en un mundo de
descontentos, aunque el primero para luchar por lo que es justo... contentándose
con lo que es suficiente... pues quien no se satisface con ello no se satisface
con nada.» Agradecerá además al Cardenal su generosidad en la instalación del
Ateneo, por la que las Juventudes de Obreros lo recordarán constantemente como
su protector.
Seguirá en el uso de la palabra el presidente del Centro Jocista (1) de Villa
Devoto Delfor González Fossat, para luego de ser izadas las banderas en el campo
de deportes, (en un mismo mástil la argentina y la jocista) lo hiciera el
miembro de la Juventudes Obreras Católicas de Palermo, José Lorencio.
Antes de abrir íntegramente las páginas de la historia de la Federación en su
desarrollo dentro de Villa Devoto, con su Ateneo, sus Círculos, su J.O.C. y sus
Vanguardias Obreras veamos como había llegado a conformarse aquel centro
deportivo que hemos dicho había nacido con la villa.
El 19 de diciembre de 1896 un entusiasta grupo de jóvenes británicos, muchos de
ellos radicados en Villa Devoto fundaban el “Villa Devoto Lawn Tennis Club”
estableciéndose inicialmente con cuatro canchas de polvo de ladrillo de la
manzana de Pareja (Chicago), Mercedes (Londres), Habana y Chivilcoy (de la
Capital) que enfrentaba la Plaza Arenales (Santa Rosa) donde levantaban además
un modesto edificio de madera que hacía las veces de salón de reuniones y
vestuario, según solicitud municipal fechada 16 de octubre de 1896.
Resultaba ser éste uno de los primeros clubes del país en esta especialidad.
Rápidamente conocido, atrae al barrio a miembros de la colectividad británica
interesados en la práctica de este deporte, haciendo que una centena de socios
utilizaran esas modestas instalaciones, las que tarde o temprano, dado el
interés despertado por el club, iban a resultar insuficientes. Desde 1906
presidía la institución James A. Goudge, vecino y enamorado del barrio, director
interino del F.C.Pacífico, quien perdurará en el cargo hasta 1911 ya que en 1912
retornaba a Londres para integrar el directorio principal de aquel ferrocarril.
Cuando a comienzos de 1908 se plantea la necesidad de reparar canchas e
instalaciones, el F. C. Buenos Aires al Pacífico colabora financieramente en la
adquisición de una fracción de tierra para establecer una nueva sede de la
institución. Es en ese momento que se adquiere la manzana de forma irregular
frente a las vías del Pacífico: Marcos Paz, Habana y Benito Juárez, donde
levantarán un pabellón según afirmará el diario de lengua inglesa The Standard
«de estilo rústico» pero algo mas acorde con las necesidades sociales del club.
Las canchas eran ahora seis y se proyectaba aumentarlas a dos mas, lo que harían,
según el mismo periódico, al Villa Devoto Lawn Tennis el mayor del Río de la
Plata». Las primeras seis canchas serían terminadas a fines de 1908, mientras
que la séptima se inauguraría el 28 de febrero de 1913 acto al que asistirían,
el Honorable James H. Lowther, «Speaker» de la Casa de los Comunes acompañado
por el embajador británico Reginald Tower y el cónsul general británico Mackie (quien
llegaría a ser socio del club), lo que señalaba la importancia que los
británicos daban al deporte que no resultaba solo una postura, ya que el partido
inaugural se enfrentaban el embajador con Winifred Reeves, hija del presidente
del club, frente a la señora de Sir Lowther y el cónsul general. La octava
cancha nunca será construida.
Entre los miembros del club se encontrará lo más expectante de la colectividad
británica del barrio, a la vez que muchos jugadores llegarán desde otros barrios
del suburbio de la ciudad. Empleados de alto rango del ferrocarril, no solo del
Pacífico sino del F. C. C. A., el director de la escuela de varones del barrio,
Mr Ernesto Tebbutt, una de las del colegio de niñas, los pastores de la capilla
anglicana de la calle Cantilo (Lacar) junto a otros que actuaran en Villa Devoto
cuando aun no se había establecido esta. Uno de sus más dinámicos propulsores
luego de Goudge fue Guillermo Mc Hardy fundador de la casa de artículos
deportivos de su nombre, importantísima en aquella época y que luego de su
fallecimiento continuara como Mc Hardy - Brown y existiera por más de sesenta
años.
Las reducidas dimensiones del salón social hará que las fiestas del club deban
realizarse en lugares fuera de el, apropiados para una concurrencia que se
afirmaba era numerosa, utilizándose en distintos casos las instalaciones del
Tiro al Segno o el local San Carlos de la calle Mercedes. La buena
predisposición siempre presente del ferrocarril hacía que se dispusiera de un
tren especial para el retorno de quienes llegaba desde otros lugares, que se
combinaba con tranvías que alcanzaban a los participantes a Belgrano, en horas
de la madrugada.
Un suceso que habla del pragmatismo británico sucede en mayo de 1910, momento en
que moría el rey Eduardo VII y británicos suspendían su participación en los
festejos del «Centenario» debido al luto correspondiente. El torneo de otoño del
club, que contaba con un número record de participantes, solo se paralizaría un
día, realizándose al mes siguiente en los salones del Tiro a Segno, el
tradicional concierto y baile anual. La orquesta que actuaba en esa oportunidad
era la del maestro Eugenio Pini la mas cotizada de la época.
Para 1912 el club llegaba a contar con 195 socios, ocupando la presidencia Frank
Reeves Ingeniero jefe del F.C. Pacífico quien fuera vice de Goudge el año
anterior. Ocupará su lugar desde el año siguiente Theo Macdonald quien lo
presidirá por más de 15 años.
El nivel tenístico se ha elevado. A mediados de diciembre de 1912 han derrotado
al Buenos Aires L. T. C. por 16 a 12 y el 9 de febrero de 1913 al Gascón L.T.C.
por 11 a 5, mientras los tradicionales certámenes abiertos de temporada reciben
una buena participación.
A fines de 1914 se marca la declinación en el número de socios lo que provoca
altibajos en el rendimiento deportivo. El estallido de la guerra provocaba el
alejamiento de un buen numero de sus miembros para «Servir al Rey y a la Patria
en algún lugar de Francia». La cifra para 1917 se ha reducido a 167 socios, de
los cuales 10 eran honorarios.
Al formarse la liga del Lawn Tenis en 1915 el Villa Devoto lo hace en segunda
división, siendo los resultados sumamente adversos, causados seguramente, por
aquellas ausencias forzadas por la guerra. Se piensa en la desafiliación hecho
que concretan antes de la terminación del año, siendo la Western Thelegraph Co.
la que representará en cierta forma al barrio, luego de 1918 en aquella segunda
división. (2)
Es un hecho curioso que el Villa Devoto Lawn Tennis tenga un predicamento muy
superior a sus reales performances. Seguramente influía para esto su «decanato»
de posible club más antiguo y sus fluidas relaciones con los periódicos de
lengua inglesa. La guerra que golpearía con fuerza a la institución, la dará una
aureola más de prestigio. 37 de sus socios el 20 %, se alejarían como
voluntarios y de ellos siete morirían en el campo de batalla. Entre los
fallecidos se encontraban los jóvenes hermanos Collin Jones, ambos excelentes
jugadores, uno de los cuales fuera campeón del Río de la Plata en el momento de
su alejamiento del país. Ya finalizada la guerra, el 9 de febrero de 1919,
durante uno de los clásicos torneos internos de dobles mixtos, se descubre un «Rall
of Honaus» (cuadro de honor que homenajeaba a los socios que habían participado
en la guerra). Aquel homenaje reunía una muy nutrida concurrencia entre los que
se encontraban, el cónsul general de la Gran Bretaña H. G. Mackie, ya socio del
club, y el embajador Reginal Tower, invitado especial, en uno de sus últimos
actos oficiales en aquel cargo.
Desde 1916 no vuelven las confrontaciones externas tal vez por no contarse con
un conjunto de la necesaria envergadura, recién en 1921 comienza una renovada
actividad deportiva, organizándose torneos semiabiertos, en donde aparecen
nombres no británicos, algunos del barrio como Figueroa, Vivaldi, de la Bandera
y Foglestron junto a otros de reconocido prestigio en el mundo tenístico como
Gazzo,Cataruzza, Lionel H. Knight y Carlos Morea. Al mismo tiempo se iniciaban
las obras de un nuevo pabellón para el club.
Es un año importante para el tenis nacional, durante agosto la Liga del Lawn
Tenis se transforma en Liga Argentina de Tenis. El Villa Devoto Lawn Tennis Club
participaría en la primera temporada de 1922, en Intermedia, donde en una
campaña sobresaliente se clasificaba campeón con una sola derrota en más de una
docena de encuentros. El equipo se integraba por C.T. Anstice, F. Prott, M
Wellfond, F. Bryans y T. H. Taylor (donde solo los dos últimos son viejos
miembros del club).
El nuevo edificio es inaugurado el 15 de mayo de 1923 durante el torneo de otoño.
Los salones son encontrados grandes y confortables por el periodista del «The
Standard». Las paredes de color crema destacan por el oscuro de los
recubrimientos en maderas, de los muebles y de los cortinados de cretona. Un
hogar en cada salón daba calidez a un día que se caracterizaba por el frío. El «salón
de estar» contaba con un bar sin privado pero habilitado al «gentler sex». (3)
Los vestuarios son amplios cómodos y aireados.
El nuevo embajador británico inauguraba junto al cónsul general Mr. Wilson las
nuevas instalaciones. En sus palabras espera «que los jóvenes miembros del club
recordarán su deuda con los predecesores no solo de Villa Devoto sino de toda la
República Argentina por este oasis de Inglaterra». Felicitando finalmente por
«la presente gran posición que ocupan en el mundo del deporte».
Refiriéndose a aquel edificio durante la década del veinte, diría una hija de
galeses llegada a Villa Devoto en 1905: «En aquellos días había un excelente
club de tenis. Mitad camino entre Devoto y Sáenz Peña. Para llegar a él debíamos
recorrer un sendero de carbonilla, que saliendo de la barrera [de Nueva York]
bordeaba las vías del ferrocarril Pacífico. Disponía de unas seis canchas de
tenis y un hermoso «Club House», donde una persona se ocupaba del bar y a su vez
servía té en el gran salón. Allí mensualmente se efectuaban bailes que se
conocían como de «Cindarella». Las mujeres vestían largos trajes de noche
mientras los caballeros lucían smocking». «Miguel’s Orchestra, una muy conocida
banda de la época, amenizaba las veladas». (4)
Para el año treinta, cuando la grave crisis económica que se adueñaba del país,
aconsejaba a los clubes barriales asociarse, la comisión del Lawn Tennis se lo
propondría a la del Club Rivadavia, que contaba con muchos miembros británicos,
unión que aceptada por estos se frustrará al no ser ésta avalada por los socios
de la primera. Posteriormente el Rivadavia lo hará con el Olimpia formando el
Club Devoto. En uno de los periódicos barriales de la época un vecino «nativo»
dado a opinar sobre el tema había previsto el fracaso de la primera propuesta,
en su opinión debido a la existencia de «diferencia de razas entre ambos clubes».
Es así como el club británico desaparecía por la situación económica, impulsando
a algunos de sus socios que mantenían el interés, a la formación junto a otros
del ex Club Olimpia, descontentos por la anterior unión, del Olimpia Lawn Tennis
Club que utilizando parte de las instalaciones dejadas por el Rivadavia
perdurando aun por una década.
Es el momento en que surge la Federación de Círculos de Obreros Católicos.
Esta Federación había sido creada el dos de febrero de 1892 por el padre
redentorista Federico Grote en el Club Católico, estableciéndose desde el 30 de
agosto de 1907 en su local propio de Junin 1063, donde hoy se encuentra.
El padre Grote, quien había sido atraído en su Alemania natal por las ideas
desarrolladas por el papa León XIII en su encíclica «Rarum Novarum», llegado a
la Argentina iniciaría una intensa labor en la formación de aquellos centro de
obreros que buscaban desde un posición filosófica antiliberal y no clasista,
contraponer la presencia de Dios al ateísmo de los grupos anarquistas,
socialistas y posteriormente comunistas que se iban desarrollando en nuestro
país. Los círculos llegarán a contar con una importante masa de seguidores y de
adherentes de poder económico importante lo que les permitiría alcanzar muchos
de los avances de la legislación social de la época, semejantes en muchos casos
a los sustentados por sus opositores socialistas.
Desde su inicio se fueron formando a lo largo de todo el país cientos de Circulo
de Obreros (Así se los llamó inicialmente, sin el agregado de católicos aun
cuando siempre fue necesario contar con un asesor sacerdotal para su formación).
En 1914 se establecía el primer Círculo de Obreros de Villa Devoto, presidido
por Jacinto Ojer Ibáñez y la asesoría del padre Agustín Nores con sede en
Joaquín V. González (Esperanza) 4070 domicilio de la imprenta de Ojer. Este
Círculo no tendría vida prolongada lo cual sería deplorado por Ojer en sus
recuerdos de 1938, año en que se formaban dos nuevos Círculos en Villa Devoto
uno con centro en la iglesia de San Rafael y el otro en San Antonio. (5)
El domingo 18 de junio de 1939 en la misa de 9 de San Antonio, participan todas
las asociaciones católicas de la época: miembros de la Acción Católica, de la
Juventud Antoniana, de las Hijas de María, y de los Exploradores de la
Congregación del Niño Jesús y de Santa Teresa, pero ahora se agregan los del
Circulo de Obreros y de la Juventud Católica Obrera.
Poco mas de un mes después de inaugurado el Ateneo, el domingo 27 de agosto, se
organizaba la primera gran carrera pedestre dentro del barrio en un recorrido
total de 7 Km., que llama la atención del periodismo barrial (6) donde triunfaba
Manuel Rivera, seguido de Luis Escudero, resultando tercero, cuarto y quinto
Domingo Russo, Augusto Martínez y José Cattólica todos ellos de Villa Devoto
quedando en sexta posición Rocha de Belgrano, siendo el preparador de los
jóvenes católicos el profesor Héctor Montalvetti. Para fines de septiembre la
J.O.C. de Betania organizaba en el Parque Centenario otra competencia pedestre
donde volvía a triunfar Manuel Rivera, seguido por Luis Escudero y Domingo
Russo.
Un año después se afirmaba que el campo de deportes había cumplido en forma
altamente eficiente su finalidad, disputándose campeonatos de fútbol, básquet
ball, tenis, bochas etc... Se dictaban además clases de educación física, de
esgrima y de natación. El 1 de diciembre de 1940 se realizan una serie de
competencias que además de incluir partidos entre distintos Círculos
participantes de los torneos de paleta, bochas y basketball, se inicia un torneo
rápido de ajedrez y exhibiciones; de esgrima entre el campeón argentino de las
tres armas Profesor Aniceto Rodríguez y su hijo el profesor del Ateneo José
María Rodríguez, otro de hockey en patines entre los equipos de River Plate y
Obras Sanitarias. En tenis que ya no sería el deporte principal como lo había
sido en la época inglesa, se competía entre jugadores de Villa Devoto.
El asesor inicial del Círculo y Vanguardias de Villa Devoto era el padre José E.
Blanco.
Leemos para 1942: «Sigue siendo el atletismo uno de los deportes mas practicados,
contándose con el entusiasmo y la participación cada vez mayor de numerosos
jóvenes deportistas, Obteniéndose ya un valioso núcleo de capacitados
deportistas que intervienen asiduamente en distintos torneos, ya sean locales o
de diversos clubes. El nombre de las Vanguardias Obreras Católicas apareció
muchas veces victorioso en distintas pistas, consiguiéndose de ese modo una
divulgación utilísima sobre la existencia de la institución y los correctos
valores que la representan.» Así lo afirmaba «Lábaro» periódico de la Federación
refiriéndose al Ateneo de Villa Devoto donde se desarrollaba el Torneo «Estimulo
1942». En atletismo se competía en 60, 100 y 400 m llanos, salto en largo y
lanzamiento del disco, dándose los récords que se marcaban en ese momento: 5,92
m en largo, 6`` 9/10 en 60, 56`` 8/10 en 400 y 30,10 m en disco. Se afirmaba
además que sus miembros habían competido a lo largo del año en la pista del club
Arquitectura en torneos organizados por la Asociación Atlética Argentina y en
otros llevados a cabo por los clubes Habana, Asociación Atlética Victoria,
Federal y Canaipe. Finalmente relata detalles del certamen efectuado con motivo
del 9 de julio, que se había iniciado con el izamiento de la bandera patria y
entonación el himno nacional, seguido de una misa de campaña celebrada por el
padre José Blanco. Se habían efectuado encuentros de básquet, y pelota a paleta
entre equipos de las V.O.C. de Devoto A y B, Versalles y Palermo. » (7)
El lugar servía no solo para actividades deportivas; el 28 de noviembre de 1942
se realiza allí una gran cena en homenaje al ex presidente del Circulo Católico
de Obreros de Villa Devoto Don Anastasio Caballero...
Eran las V.O.C. la rama juvenil de la federación quienes contaban con un órgano
periodístico La Voz Juvenil, en donde el presidente de sección Villa Devoto
Francisco Rivera se enorgullecía para 1943 de su actividad. Refiriéndose al tema
deportivo que es el que aquí con atañe dice «nada mas elocuente de las numerosa
copas y medallas que exhibimos [que] demuestran la gran actividad y capacidad
que en esta rama tuvo nuestro centro.» Deplora que las vanguardias no cuenten
con un local social propio demostrando que el ateneo sirviendo como centro
deportivo no era de exclusivo uso de los vanguardistas. Se entusiasma con los
440 socios con que cuentan y de las múltiples actividades que realizan: «llevando
a cabo con relativa facilidad, [tanto] la consumación de una ceremonia religiosa,
como la de un torneo deportivo; la preparación de un suelto o crónica
periodística, como la confección de un festival artístico»... agregando «no solo
se dice, sino se hace, porque se puede y quiere».
El 25 de mayo de ese año en el Ateneo se despedía el Pbro. Blanco de los
Vanguardistas y de los jóvenes de la Acción Católicas a quienes asesoraba. El
padre era trasladado a la parroquia de San José de Flores, siendo reemplazado en
Villa Devoto por el padre Moisés Soto...
El 8 de diciembre de 1945 se inauguraba, como era habitual y lo seguiría siendo
todos los años la temporada de natación, con la presencia del cura párroco de
San Antonio el pbro. Hermenegildo Fazio quien bendeciría las aguas «en medio de
un considerable número de vanguardistas». La nutrida concurrencia es confirmada
por una fotografía donde treinta y dos muchachones se apiñan sobre la estructura
de los trampolines que demuestran una resistencia estructural satisfactoria.
Hay algo que llama la atención en la documentación que nos guía y es confirmado
por las fotografías. Todos son hombres, lejos a quedado aquello del «gentler
sex» del mundo británico, aquí se vive el espíritu de entrega, militancia y
apostolado cristiano, donde el deporte será una faceta mas como había vaticinado
el padre Carboni en sus palabras fundacionales. Este espíritu se mantendrá
inalterable a través de los años aun cuando se llegue a permitir el acceso
femenino en horarios diferentes y de las familias los días domingo.
El 7 de junio de 1953 en el Ateneo se conmemoran, con una misa de campaña «oficiada
por el joven sacerdote redentorista Inocencio Jacobellis, los 9 años de la
implantación del día del aprendiz propiciado por las vanguardias e implementado
por el gobierno revolucionario de 1943, por iniciativa del en ese momento
coronel Juan Domingo Perón, quien por ese motivo reunirá a los miembros de la
Federación en su salón de actos de calle Junin. (8)
Dice el «espectador» como firma la nota, con ese apasionamiento que
acostumbraban quienes militaban en las vanguardias y que se mantiene a través de
los años: «Estos valientes muchachos, verdaderos cruzados de Dios, son los que
la Iglesia envía para conquistar las almas y los corazones perdidos en el mundo
de los obreros, Remeras blancas, signo de la guerra pacífica que ellos emprenden
contra el error.»... «El entusiasmo sano, la camaradería sincera, se notaron
durante los campeonatos relámpagos que siguieron a continuación.» (9)
(1) Juventudes Obreras Católicas.
(2) En 1914 se instala en Villa Devoto el Hotel de Solteros de la Wester
Telegraph Co., En la que había sido quinta de J.A.Goudge, Francisco Beiró (Tres
Cruces) 4406. Desconocemos si existió algún antagonismo deportivo entre ambos
pero curiosamente el primer enfrentamiento será el 3 de agosto de 1914 y tres
días después se inicia la Primera Guerra Mundial. El resultado será adverso para
el Villa Devoto, que tendrá revancha como visitantes a comienzos del año
siguiente ganándoles a los locales por 11 a 4.
(3) Traducido a nuestra época esto significaría que no se contaba con salón para
familias, pero estaba permitido la presencia de señoras en el bar.
(4) Carta remitida en 1998 desde la Cumbre Córdoba por la señora Ap Iwan viuda
de Deanne cuando contaba con 92 años. Hasta 1922 no hemos encontrado referencia
de bailes en el Pavillon del club que siempre hemos pensado no era lo
suficientemente amplio para contener una orquesta. The Standard del 14 de agosto
de 1921 invitaba a un a reunión danzante en el salón Augusto de Sarmiento 1374
donde actuaría la orquesta del Sr. Anselmo Miguel llamada Miguel’s Orchestra.
Tranvías de la 86 a las 2 1/2 de la mañana llevarían a los participantes hasta
Villa Devoto.
(5) Este dato procede de publicaciones de la misma Federación aunque Jacinto
Ojer Ibáñez, en sus recuerdos de 1938 da como fecha el 13 de marzo de 1913 al
que se agregaba un centro de acción social bautizado «Manuel D. Pizarro» que
podría aun perdurar. Concretábanse con ese fin, según su relato, mítines,
manifestaciones y conferencias. Para llevar adelante este Círculo dice Ojer
haber sido secundado por «un grupo de caballeros», entre los que debió
encontrarse Leandro Arroqui y contar, como éste afirmara, con la participación
del padre Nores. Ojer y Arroqui debían desconocer la formación de estos nuevos
círculos ya que no se refieren a su existencia cuando rememoran el anterior.
(6) La Razón de Villa Devoto 3 de septiembre de 1939.
(7) Nos resulta dificil comprender en que lugar se efectuarían este tipo de
competencias dentro del Ateneo.
(8) El teatro notable en su estructura no puede ser hoy utilizado, ni siquiera
como aula, por motivos de seguridad.
(9) La Voz Juvenil Año XIV Nº 169 Julio Agosto 1953).
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